Boletín Psicoevidencias nº 53
ISSN 2254-4046
La American Journal of Occupational Therapy publica una serie de fichas informativas sobre el rol de la terapia ocupacional en diferentes patologías e intervenciones referentes a la salud mental. En este caso se centra en la terapia ocupacional en la salud mental comunitaria, y en ella, los equipos de tratamiento asertivo comunitario.
Los orígenes de la terapia ocupacional están arraigados en la salud mental, ya que la creación de la profesión se unió al movimiento de higiene mental de principios del siglo XX. Hoy en día, los profesionales de la terapia ocupacional brindan servicios en entornos comunitarios que incluyen, entre otros, los equipos de tratamiento asertivo comunitario (ETAC).
A medida que los servicios para personas con enfermedades mentales han pasado del hospital a la comunidad, también ha habido un cambio en la filosofía de la prestación de servicios. En el pasado, hubo una adhesión al modelo médico; Ahora el foco está en incorporar el modelo de recuperación. Este modelo reconoce que la recuperación es un proceso a largo plazo, cuyo objetivo final es la participación plena en las actividades de la comunidad. Estas actividades pueden incluir obtener y mantener un empleo, ir a la escuela y vivir independientemente. La base filosófica del modelo de recuperación se adapta bien a la terapia ocupacional porque el propósito de la terapia ocupacional en la salud mental comunitaria es aumentar la capacidad de un individuo para vivir lo más independientemente posible en la comunidad al tiempo que participa en roles de vida significativos y productivos.
Existe evidencia de que las intervenciones de terapia ocupacional mejoran los resultados para aquellos que viven en la comunidad con enfermedades mentales graves (AOTA, 2012). Tales intervenciones se pueden encontrar en las áreas de educación, trabajo, entrenamiento de habilidades, salud y bienestar, y rehabilitación y adaptación cognitiva. Ejemplos de intervenciones de terapia ocupacional en salud mental comunitaria incluyen:
- Evaluar y adaptar el entorno en el hogar, el trabajo, la escuela y otros entornos para promover el funcionamiento óptimo de un individuo.
- Trabajar para desarrollar intereses y actividades de ocio o profesionales.
- Facilitar el desarrollo de las habilidades necesarias para la vida independiente, como uso de recursos comunitarios, mantenimiento del hogar y organización del tiempo.
- Proporcionar capacitación en actividades de la vida diaria.
- Llevar a cabo evaluaciones funcionales y seguimiento continuo para la incorporación exitosa en el trabajo.
- Proporcionar orientación y consulta a personas en todos los entornos de empleo, incluido el empleo de apoyo.
- Proporcionando evaluación y tratamiento para deficiencias en el procesamiento sensorial.
Las personas de todas las edades a las que se les diagnostica una enfermedad mental pueden beneficiarse de la terapia ocupacional. Además, los amigos y miembros de la familia también pueden beneficiarse de estos servicios para aprender formas de manejar el estrés del cuidado y cómo equilibrar sus responsabilidades diarias para permitirles continuar llevando vidas productivas y significativas.
Una copia del documento puede obtenerse en el siguiente enlace.