Milagros Pérez Oliva, analiza en El País las malas prácticas asociadas a las últimas grandes multas a farmacéuticas del tamaño y prestigio de GlaxoSmithKline y Abbott en el articulo titulado Medicamentos en busca de enfermedad (en este enlace se puede consultar el original publicado el 9 de julio de 2012) con ejemplos del abordaje de venta de fármacos con indicaciones en Salud mental, como Paxil o Prozac.
En dicho artículo se señalan entre las artimañas que están detrás de estas sanciones, vender medicamentos para patologías en las que no están indicados, pagar a los médicos dádivas y sobornos para que los prescriban y, lo que es más grave, ocultar la existencia de efectos adversos.
La autora señala que tras esas malas prácticas subyace un giro estratégico, emprendido por algunos laboratorios a finales de los años ochenta, para incrementar los beneficios, no por la vía de obtener nuevos y mejores fármacos (que resulta muy costoso), sino por la de conseguir nuevas indicaciones para sus viejos medicamentos. Esta estrategia incluye la creación artificial de enfermedades, lo que en inglés se conoce como disease mongering, es decir, el intento de convertir procesos naturales en la vida como la menopausia, la tristeza o la timidez, en patologías susceptibles de ser tratadas con fármacos. En dicha publicación se puede profundizar sobre cada una de estas estrategias de marketing abusivo.